
Los aztecas eran muy, muy listos. Ellos descubrieron las propiedades de la chía, unas semillitas que parecen poca cosa pero que refuerzan el sistema digestivo y ayudan a tener un cuerpazo, la piel radiante y un montón de cosas buenas. Nosotros le hemos metido además las manzanas, el mango y el plátano para darle sabor y vitaminas... ¡y la pasión de la fruta ídem!
--
INGREDIENTES:
2 manzanas frescas licuadas al vacío (como tiene que ser)
Un pedazo de mango jugoso y tierno, sí, de esos que sólo verlos piensas ¡mh!
Un plátano molón
Un chorrito de zumo de fruta de la pasión
Y una cucharada de chía (Salvia hispánica) hidratada